Hoy es jueves santo, comí carne y me dió lo mismo.
Supongo que esta ocasión ya es una fecha más dentro del calendario, ese que cada año agrega más motivos para no ir a trabajar y quedarse en la casa. No le veo nada de malo, la gente trabaja cada vez más y necesita uno que otro día para estar con los suyos.
Mi familia es un vívido ejemplo de aquello. No voy a entrar en detalles, pero es así, todo un fin de semana para vernos y reflexionar sobre quién sabe que.
Pero no es un fin de semana más, los malls están cerrados, los supermercados no abren, lo único es quedarse en la casa o "arrancarse a la playa".
Años atrás, esta fecha tenía mucho más significado. En el colegio se solía cantar canciones religiosas y hacer reflexiones relativas al tema, lo que implicaba no hacer clases e irse más temprano a la casa. Tenía su gracia el asunto.
Uno llegaba a la casa y se sometía al bombardeo religioso de la televisión. Total era una vez al año.
Uno no podía arrancarse de la semana santa. En la tele te mostraban la biblia en formato cinematográfico, el recorrido comenzaba con adán y eva, el arca de noé, etc etc hasta llegar a la vida y obra de jesús.
Ahora que existe el tv cable, uno se puede arrancar de la programación ad hoc a la fecha y ver cualquier otra cosa.
Mañana será viernes santo, el día mas heavy de estas fechas. Así que comeremos pescado como buenos cristianos y trataremos de ser mejores personas.
Supongo que esta ocasión ya es una fecha más dentro del calendario, ese que cada año agrega más motivos para no ir a trabajar y quedarse en la casa. No le veo nada de malo, la gente trabaja cada vez más y necesita uno que otro día para estar con los suyos.
Mi familia es un vívido ejemplo de aquello. No voy a entrar en detalles, pero es así, todo un fin de semana para vernos y reflexionar sobre quién sabe que.
Pero no es un fin de semana más, los malls están cerrados, los supermercados no abren, lo único es quedarse en la casa o "arrancarse a la playa".
Años atrás, esta fecha tenía mucho más significado. En el colegio se solía cantar canciones religiosas y hacer reflexiones relativas al tema, lo que implicaba no hacer clases e irse más temprano a la casa. Tenía su gracia el asunto.
Uno llegaba a la casa y se sometía al bombardeo religioso de la televisión. Total era una vez al año.
Uno no podía arrancarse de la semana santa. En la tele te mostraban la biblia en formato cinematográfico, el recorrido comenzaba con adán y eva, el arca de noé, etc etc hasta llegar a la vida y obra de jesús.
Ahora que existe el tv cable, uno se puede arrancar de la programación ad hoc a la fecha y ver cualquier otra cosa.
Mañana será viernes santo, el día mas heavy de estas fechas. Así que comeremos pescado como buenos cristianos y trataremos de ser mejores personas.
4 comentarios:
Así es ... le religión es capaz de perseguirte hasta en sueños...
Tampoco es tan terrible, total, hemos aprendido a vivir, a crecer y a pensar tal y como lo hacían los cristianos hace dos mil años atrás.. menso mal que nuestra generación es un poquito más evolucionada y no cree tanto en los mitos y leyendas que otrora nos hacían aprender casi de memoria.
No digo que la religión esté equivocada, sea mala o que no comparta algunas de sus creencias (por una cosa cultural y educacional fundamentalmente, crecí creyendo que era una verdad absoluta). Sin embargo, supongo que concuerdas que los fanatismos extremos son malos, porque no dan cabida a otros ideales...
En fin
Te Agregaré todo el rato a mis liks!
Un beso..
Me encanta semana santa.
Y eso que siempre como carne el viernes.
Yo quería comer carne esos días y no me dejaron...
Ya no creo como antes, es raro como experimenté estas fechas, como si nada!
las cosas cambian parece.
Besitos =o***
En la cuaresma o semana santa no se trata de comer o dejar de comer carne solo por que sí o por tradición,lo importante es dejar de comer o dejar de hacer aquello que más nos guste, o sea, un pequeño sacrificio personal, en honor a Jesucristo, por el enorme sacrificio que realizó por nosotros. Pero ésto conlleva no sólo el ayuno sino también la oración y meditación. De nada sirve dejar de comer o de hacer, si pasas todo el día haciendo cosas malas.
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